
La cirugía estética de mamas, es una de las cirugías estéticas mas solicitadas de los últimos años.
A partir de la década del ´80, progresivamente los volúmenes de los implantes mamarios han ido aumentando, colocándose actualmente medidas de prótesis que 20 años atrás eran impensadas.
El constante progreso en el desarrollo de las prótesis de mamas, permiten hoy en día que estén compuestas por un gel cohesivo que impide la migración a través de su cubierta y eventualmente por la su rotura accidental.
Otro avance de comienzo de este siglo, ha sido los diferentes perfiles o formas de prótesis mamaria que pueden utilizarse de acuerdo al tipo de la mama que tenga la paciente y a la forma que le gustaría tener.
A los perfiles altos y moderados de los implantes mamarios, se le suma los naturales y los anatómicos, que proyectan más el polo inferior de la mama por su forma en gota de agua, dando un aspecto más natural a la misma. La combinación del volumen y el perfil de la prótesis mamaria, se obtendrá el resultado deseado por la paciente luego de someterse a una cirugía estética de mamas.
La vía de ingreso más utilizada de estos implantes, son la periareolar y la submamaria. Ambas incisiones, nos permite un fácil acceso al espacio donde queremos colocar las prótesis.
De acuerdo a las características anatómicas de la paciente, la ubicación del implante protésico de siliconas puede ser por delante del músculo pectoral mayor (Retroglandular) o por detrás del mismo (Retromuscular).
En ambos casos, nunca se interrumpe la continuidad de la glándula mamaria y el pezón, por lo tanto no va verse comprometida la lactancia en pacientes que en un futuro puedan amamantar luego de esta cirugía.
